Uno de los pasos más importantes en los procesos convencionales de depuración de aguas residuales es la eliminación de sólidos en suspensión y partículas coloidales que se mantienen de forma estable en el agua. Esto se consigue en los tratamientos primarios o fisicoquímicos de las depuradoras.
El tratamiento fisicoquímico, compuesto por una fase de coagulación, otra de floculación y una decantación final, tiene como objetivo la alteración del estado físico de estas sustancias mediante la adición de productos químicos para convertirlas en partículas capaces de ser separadas por sedimentación. Concretamente consiste en adicionar compuestos para neutralizar la carga del coloide y romper su estabilidad. En el primer paso, la coagulación, se desestabilizan los coloides por neutralización de sus cargas, dando lugar a la formación de partículas de mayor tamaño. Posteriormente, en la floculación, se unen los coágulos para aumentar su volumen y peso de forma que puedan decantar.
El segundo paso del tratamiento fisicoquímico, la floculación, pretende unificar los coágulos formados en grandes partículas capaces de sedimentar con mayor velocidad. Para ello, se introduce un agente floculante y se somete el agua a tratar a una agitación muy lenta, que asegure la mezcla de los reactivos a la vez que no rompe los flóculos formados. Los más empleados son los minerales, también denominados polielectrolitos.
Fluidmix dispone de equipos de preparación de polímero en continuo. Nuestros grupos de preparación de polielectrolito, Autofloc, se caracterizan por ser equipos compactos y modulares que permiten la preparación automática y continua de una solución homogénea a partir de polielectrolito seco o líquido, garantizando su concentración constante en diversos porcentajes.
El Autofloc está compuesto por un tanque de tres compartimientos: Preparación-humectación, maduración y dosificación (opcional). Estos compartimientos están interconectados de manera que se imponga un circuito preferencial al polímero, con el fin de evitar el paso directo desde el compartimiento de preparación al de dosificación, asegurando una producción de polímero de buena calidad. La preparación de polímero se inicia automáticamente por el accionamiento de un sensor de nivel instalado en el último compartimiento del tanque. Si en el tanque se alcanza el nivel bajo, el sensor de nivel envía una señal que da inicio a la preparación del polímero sin que se interrumpa el suministro de polímero al proceso.
El empleo de polímeros y floculantes favorece de forma considerable los procesos de separación entre las fases sólido – líquido en aplicaciones como:
- Tratamiento de aguas potables e industriales de proceso.
- Depuración de aguas residuales, específicamente en tratamientos físico – químicos
- Tratamiento de fangos, para mejorar el rendimiento de centrífugas y filtros prensa.
- Procesos industriales en papeleras, industria química, petroquímica, tratamiento de minerales, conserveras, etc.
Ficha Técnica
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